El Congreso de Morelos aprobó un punto de acuerdo para exhortar a la Guardia Nacional, a Caminos y Puentes Federales (Capufe), así como a las secretarías de Seguridad Pública de Morelos y de la Ciudad de México, para que, en el ámbito de sus respectivas competencias y atribuciones, realicen patrullajes y acciones que garanticen la seguridad en la carretera México-Cuernavaca.
La propuesta fue presentada por el diputado del Partido Acción Nacional (PAN), Daniel Martínez Terrazas, durante la sesión ordinaria del jueves y fue aprobada por unanimidad.
En tribuna, el legislador lamentó la creciente inseguridad y violencia en los últimos años, «especialmente debido a la presencia de grupos criminales y a la violencia relacionada con el narcotráfico, la extorsión, los asaltos y otros delitos. Esta situación se ha agravado por disputas entre organizaciones delictivas y la aparición de nuevas células del crimen organizado».
Martínez Terrazas señaló que, en un estado como Morelos —con destinos turísticos importantes como Tepoztlán, Cuernavaca y otros pueblos mágicos— la percepción de inseguridad en zonas cercanas afecta seriamente la afluencia de visitantes, aunque algunas áreas turísticas aún se consideran relativamente seguras.
A pesar de las acciones emprendidas por las autoridades, añadió el diputado, «los asaltos en la autopista México-Cuernavaca siguen generando gran preocupación entre los automovilistas, especialmente entre quienes transitan con frecuencia por esa vía».
«Esto ha minado la confianza en la seguridad de la carretera. Aunque las autoridades locales siguen trabajando para reducir la incidencia delictiva, esta autopista continúa siendo una de las más afectadas por robos a mano armada y asaltos a vehículos particulares y camionetas», denunció.
Según el diputado panista, el tramo más peligroso se encuentra entre la Ciudad de México y Cuernavaca. «Debe existir una cooperación efectiva entre las autoridades y las secretarías encargadas de garantizar la seguridad de los ciudadanos, tanto en Morelos como en la capital del país», subrayó.
Advirtió que los delitos se cometen tanto de noche como de madrugada, e incluso a plena luz del día, y que van en aumento. «Son asaltos, robos y secuestros exprés. No podemos seguir permitiendo que nuestras carreteras sean tierra de nadie», enfatizó.
Además, relató que, en una ocasión —sin precisar la fecha exacta— sujetos desconocidos colocaron piedras sobre la autopista para obligar a los vehículos a detenerse. «Cuando los conductores bajan para revisar los daños, son sorprendidos por grupos delictivos», explicó.
Según información local, uno de estos incidentes ocurrió en abril pasado en los kilómetros 34 y 35 de la autopista México-Cuernavaca, cerca del poblado de Topilejo, en la Ciudad de México.
«Ocho vehículos resultaron afectados. Sus conductores, temerosos de ser agredidos, decidieron no detenerse hasta llegar a la caseta de Tlalpan, donde informaron a las autoridades», agregó.
Ante esta situación, el legislador panista hizo un llamado urgente a las autoridades correspondientes para que refuercen, de manera coordinada e inmediata, la vigilancia y prevención del delito en la autopista México-Cuernavaca, especialmente en los tramos más vulnerables, como Tlalpan, Topilejo, La Pera-Cuautla, los puntos con mayor afluencia vehicular, así como las veredas colindantes que comunican, de forma irregular, la carretera federal con la Autopista del Sol.